QUÉ GRANDES SOIS, ¡COÑO!

Hoy todos los blogs hablan de lo mismo. En todas las portadas aparecen los mismos nombres. Los informativos de TV muestran las mismas imágenes. Los debates deportivos de radio discuten sobre la misma pregunta. Los aficionados al fútbol hablan sobre el mismo partido. Parece que todo España -y parte del mundo- se ha puesto de acuerdo para tratar el mismo tema, el mismo equipo y los mismos jugadores. Hoy el Barça -una vez más- es noticia. Anoche goleó, ganó, jugó y arrasó frente a un Depor que hizo lo que pudo y lo que el 'Titán' llamado Barça le dejó. Porque ayer no fue Lotina el que actuó mal, ni fueron los deportivistas los que no supieron afrontar el choque. Con partidos como el de ayer, no importa si el que está delante se llama Deportivo de la Coruña, Manchester United con su galardoneado portugués enfrente, o Atlético Alcorcón. 55 fueron los minutos que pude ver el encuentro. 55 fueron los minutos que volví a disfrutar del fútbol total de los blaugranas. Ya no se me ocurren más adjetivos para calificar a este equipo de ensueño que hace disfrutar a cualquier aficionado al fútbol; ya no sé que más poner sobre el club bate-récords.

Cuando comencé a ver el partido, allá por el minuto 35 de la primera mitad, Messi, con una veloz internada diagonal y una finalización sutil y bella, y Henry, con un testarazo a centro -increíble con el exterior de la bota- de Alves, ya habían adelantado a los culés y asediaban constantemente la meta gallega.
A los pocos minutos de comenzar -para mí- el choque, a los seis exactamente, Eto'o hizo el tercero en el marcador. Centro de Alves (increíble lo de este jugador, capaz de subir la banda constantemente, colgar balones, lanzar golpes francos y estar atrás muy rápido para defender con garantías), remate de Henry -cada día más fino, el galo-, parada y rechace de Aranzubía que aprovechó Eto'o para marcar su decimoséptimo tanto en Liga.
Así se llegó al descanso. El líder de líderes con una ventaja insuperable (más en el Camp Nou), un Depor tocado moralmente y una segunda parte para disfrutar.
Yo, sentado en el sofá pensaba que ya no iba a ver mucho más fútbol.
"El Depor, perdiendo de tres, se va a encerrar atrás y va a evitar llevarse más goles para A Coruña. El Barça, por su parte, disfrutará tanto que se relajará y ya no podré ver más goles".

Y mientras pensaba, 'el pito' de Rodriguez Santiago me indicó que la segunda parte comenzaba. Esperando ver si mis pensamientos eran correctos, los minutos pasaron y, aunque no del todo, el Barça aflojó bstante. El Depor, más defensivo que en la primera mitad, presionaba más y mejor y al Barça le costó hacerse con el control del balón tan fácilmente. Fue la entrada de De Guzmán en la media lo que complicó la existencia al equipo de Pep, ya que éste se dedicó a impedir que el astro del balón y jefe del tempo del Barça, Xavi, tocase el balón con facilidad y cerca del área deportivista.
Pero a la réplica de Lotina le llegó la contrarréplica del técnico culé. "¿Tú me intentas anular a Xavi?...Vale, meto a Iniesta y a ver si puedes con los dos juntos...". Y así fue. La entrada de Iniesta cambió la tónica de la segunda mitad. Más espacios, mayor control de balón y De Guzmán 'loco', detrás de los centrocampistas del Barça, de los bajitos capaces de marear a diez como el canadiense en diez metros cuadrados.
Y así se llegó a los diez últimos minutos. Tras un 'gilicórner' (esos que se la pasan en corto y que pocas veces tiene resultado...), Xavi se la dio a Iniesta, que se la devolvió -engañando a todos- y se quedó delante del meta deportivista. Allí, Xavi lavantó la cabeza, buscó compañeros libres y la pasó. El balón tocó en el meta riojano y se posó en los pies de 'Tití' quien batió la meta por segunda vez en el partido. 11 son ya los goles del francés al que muchos daban por acabado hace no muchas semanas.
Luego llegó la mejor jugada del partido. La que demuestra las ganas de este equipo por medio de su máximo representante. Tras una carrera de 80 metros a sprint, el gran capitán Puyol recibió un balón medido de Iniesta en una contra y, tras espectacular elevada del balón -sobre Aranzubía- digna de los más prodigiosos jugadores del balompié mundial, fue derribado por el meta visitante causando un penalty transformado por Eto'o y que puso la manita en el marcador.
Como nota significativa, comentar que el Depor ya había agotado todas sus sustituciones y fue Juan Rodríguez el encargado de ponerse los guantes de cancerbero. Tras el gol, el camerunés dejó otra muestra de lo buena persona que es.
Sí, soy defensor a ultranza de Eto'o y creo que es uno de los mejores futbolístas, tanto dentro como fuera del campo. Otro gesto de crack que demuestra lo grande que es el camerunés.

Imagen: As.com